Guayaquil

Guayaquil

Breve panorama de la ciudad de Guayaquil en la Costa ecuatoriana

Por Molly Boeder y Ted Karsch

Introducción
Historia

Guayaquil es la ciudad más grande de Ecuador y ocupa un lugar primordial en la economía nacional. Gran parte de este avance económico se debe a su ubicación geográfica, pues se encuentra en la convergencia de dos grandes ríos: el Daule y el Babahoyo, a sólo 70 km del océano Pacífico. Luego de años de negligencia burocrática, finalmente la ciudad ha tomado su desarrollo en sus propias manos. Energizada por su recién descubierto interés en el turismo y su eterno compromiso con el desarrollo de la pequeña empresa y de los emprendedores comerciales, Guayaquil está plenamente consciente del potencial con que históricamente ha contado. No es posible decir, a estas alturas, que el renacimiento de Guayaquil sea un hecho consumado, pero sí que los signos de su avance están por todo lado. La prueba más fehaciente es su renovado Malecón 2000 con su colección de restaurantes, así como de espacios recreativos y culturales a largo de la Avenida Malecón que corre paralela al río Guayas.

Entre 1535 y 1547, algunos españoles intentaron establecer asentamientos en las inmediaciones de la zona donde actualmente se encuentra Guayaquil, pero la feroz oposición de los indígenas que habitaban el área no se los permitió. Fue Francisco de Orellana quien en 1547 los derrotó y fundó la ciudad oficialmente. Irónicamente, el nombre de Guayaquil deriva de los nombres de los jefes indígenas Guayas y Quil, su esposa, quienes se suicidaron antes de verse sometidos al yugo español. La pasión y el orgullo de los jefes Punás aun vive en sus descendientes. Los más de 2 millones de guayaquileños que habitan en la ciudad son también etnológicamente muy diversos: indígenas, hispanos, mestizos y africanos. Pero todos heredaron el espíritu indómito de Guayas y de Quil, que se hace evidente tanto en su rápida dinámica de vida como en la sangre caliente de su gente.

Desde su fundación, Guayaquil ha crecido hasta convertirse en la urbe más populosa del país y en una de las plazas comerciales más importantes de América del Sur. El desarrollo económico de la ciudad no ha sido cosa fácil, o al menos no ha estado exento de obstáculos. Inicialmente fue lento debido a la carencia de mano de obra dada la resistencia que opusieron tanto indígenas como africanos a ser explotados. Al punto que debieron importar indígenas de la Sierra como trabajadores asalariados para que la industria regional pudiera despegar. Actualmente el Puerto Marítimo de Guayaquil recibe el 90% de las importaciones que llegan al país y es responsable del 50% de las exportaciones de la nación, lo que le convierte en la fuerza motriz detrás del desarrollo de la economía nacional.